lunes, 30 de abril de 2018


El reto de hoy es “escuchar a alguien sin opinar.”

 


Si eres un Walden Runner, hoy toca escuchar a tu compañero de fatigas, olvida tus experiencias, no interrumpas, déjalo ser el protagonista aunque del fondo de tus recuerdos salga una experiencia igual, superior o peor que te mueras de ganar por comentar.

Hoy el protagonista no eres tú.

Si ya te enganchaste a nuestros retos y empezaste a caminar, elige a tu hijo, tu marido o a un amigo en tu paseo y escúchalo. Concédele el turno para desahogarse.

Hoy el protagonista será el otro.

 

Las monjitas Dominicas de Lerma, nos regalan cada madrugada con un reto de amor.

 

Yo os invito también a iluminar cada mañana con un propósito que de significado a vuestro viaje. Sé que todos tenemos un misión, aprovechemos nuestro running para cumplirla, ese es nuestro Proyecto Walden.

Además, soy una incorregible humanista:

Creo en el ser humano, en todos y cada uno de ellos, y en su capacidad de superación.

Creo que el hombre puede crecer sin límite, pero para ello hay un camino.

Experimentar como crece vuestro espíritu y vuestra mente, usando una de las herramientas que para crecer nos ofrece ese camino:

                        Escuchar.

 

Enhorabuena a Raul de la Cruz, nuestro Walden Trainer, que ayer finalizó el Medio Iron Man de Marbella.

Raúl eres un crack!!! Hoy queremos escucharte a ti en nuestra sesión de running.

 
Pilar Amián  

Cofundadora del Método Walden.

domingo, 29 de abril de 2018



Sonreír


El Reto de hoy es sonreír a la primera persona con la que tropiece al despertarme cada mañana.”
Si eres un Walden Runner tienes un extra: “sonreír y saludar a la primera persona con la que te cruces en tu running”.
La Madre Teresa de Calcuta nos dice hoy en su precioso libro La Alegría de Amar: 
“Jamás sabremos cuanto bien puede hacer una simple sonrisa”
Y yo añado: incluso una sonrisa hipócrita nos cambia el estado de ánimo. Os reto a que probéis el efecto sobre vuestra cara y vuestro cuerpo de una sonrisa forzada. 
Abandonemos las caras tristes pues la tristeza y la alegría son como la epidemia de la gripe, si un miembro de la familia la tiene el resto está condenado en un ochenta por ciento a contagiarse.
Comparto con vosotros la plaga de sonrisas del grupo de las Tortugas en su visita a Jerusalén.
El grupo de las Tortugas son un grupo de padres con hijos en el cielo, entre ellos están los padres de José Amián y Belén Jordana. 
Maria Parames, Pepe Amian, Belén Poole , Jose Jordana y resto de padres permitidme compartir vuestra sonrisa con mis Walden Runners para que se todos nos contagiemos de ella.
Chicos entre los valores del Walden Running está el de la solidaridad con vuestros compañeros de carrera. Vuestra misión es contribuir a que se extienda la alegría en vuestro círculo y una simple sonrisa es la llama que activa la epidemia.
Pilar Amián
Cofundadora del Método Walden
pamian@metodowalden.com

sábado, 28 de abril de 2018


EL RETO
Nos despertamos una mañana y descubrimos que estamos en medio del desierto, sin brújula. Miramos el horizonte y solo vemos dunas y dunas de arena.
¿Qué hacemos?
Empezamos a caminar sin rumbo hacia cualquier lugar y al cabo de un tiempo nos hundimos en la desesperación. La incertidumbre de no saber hacia donde ir nos tumba.
Nos rendimos y dejamos de avanzar.
Sin meta, sin horizonte, nuestra mente no puede encontrar el camino.
Propongo un reto cada día:
Una brújula en medio del desierto de nuestra vida que nos ilumine para poder encontrar el camino del crecimiento personal.
Me voy a despertar cada mañana con un pequeño reto.
El reto de hoy es: Salir 30 minutos a moverme tres días a la semana.
Para los que nunca lo hayáis hecho:  30 minutos a andar; los que estéis empezando: 4 minutos andando y 1 trotando.
Los que llevéis un año entrenando: 30 minutos seguidos, 3 días a la semana.
Los que lo tengáis más que superado, haced algo más, un reto de amor: “Convencer a algún amigo, compañero o familiar para salir a caminar/trotar esos 30 minutos.”
Una vida sin retos es como un barco a la deriva.


Pilar Amián
pamian@metodowalden.com

jueves, 26 de abril de 2018


Estás haciendo Historia

Ayer les tocó a los chicos darnos la clase de Walden Running, los protagonistas fueron ellos, mientras Raúl y yo callábamos.

            Tras un año corriendo, relataron aquello que tenían dominado y aquello que les frustraba.

            Previamente les recordamos nuestro objetivo con el Proyecto Walden : la Superación Personal a través del control de las cinco herramientas que nos regala la naturaleza y en el movimiento, sin embargo, nos traicionan.

            La respiración nos ahoga, la mente nos lanza pensamientos boicoteadores, el sentido interno esfuma, la postura se deforma y la imaginación aprovecha para extraer recuerdos de escenas de sufrimiento.

           

            Cristina cerraba la sesión expresándonos su indignación porque tras un seis meses corriendo no había conseguido disfrutar cuando salía sola; solo con el grupo de Walden Runners se contagiaba de fuerza y energía. El resto de los chicos asintieron también.

           

            Meditación

           

            Esta madrugaba mientras trotaba con Henry entorné los ojos, alcé la mirada al cielo y medité sobre los comentarios de Cristina:

            “Nos aproximamos al deporte con tantos prejuicios negativos y con un sentido tan arraigado de que es una obligación dolorosa, que cualquier posibilidad de disfrutarlo se hace inalcanzable. Le exigimos unas contraprestaciones tan altas que si hiciéramos lo mismo con nuestros seres queridos nos abandonarían declarándose impotentes.”

                       

            Reflexión.

 

            A lo largo de nuestra vida emprendemos un montón de actividades sin plantearnos si sufrimos al practicarlas, si nos cuesta trabajo iniciarlas ni por qué no sonreímos durante todos los segundos de su ejecución.

            Muchas de ellas son incluso opcionales y las elegimos para nuestras vacaciones.

            Pongo el ejemplo:  Un viaje.

            “Hacer las maletas para salir de viaje”. Odio tanto hacerlas que las colocó una semana antes sobre mi cama para que sea algo paulatino y más llevadero.

            Siguiendo con el mismo ejemplo:

            El viaje en el avión puede ser desde aburridísimo hasta terrible para nuestras piernas, sobre todo para aquellos que, como yo, tienen la circulación regular pero compramos el billete llenos de entusiasmo.

            La llegada al hotel agotados, con la incertidumbre de la habitación que nos pueden dar, la obligación impuesta de soltar el equipaje y salir a recorrer el lugar para no desaprovechar ni un segundo, es otro plato digno de considerar.

            El calor, el frío, la comida diferente, las largas caminatas o las horas en el autobús si estamos en un tour son más argumentos para desmotivarnos de esta aventura.

            Parece algo mucho más terrible que salir a correr, y sin embargo, la mayoría, estamos deseando viajar.

 

            Análisis del viaje

                         

            Además,  nos aporta muy buenos y bonitos momentos:

            1º.- Estamos de vacaciones y enterramos los problemas laborales incluso personales. Despejamos la mente.

            2º.- Regalamos nuestros ojos con escenarios diferentes a los habituales.

            3º.- Rompemos rutinas.

….       4º.- Caminamos sin parar, a veces sin aliento, esperando con ansiedad girar en la próxima calle para descubrir una nueva maravilla.

            5º.- Al final del día soñamos con llegar al hotel a descansar y regalarnos con una cervecita.

           

            Podría seguir enumerando muchas otras satisfacciones que nos aporta esta actividad pero prefiero volver a mi running y compararlo con ésta última.

           

            Nuestras creencias nos condicionan.

            Viajar es oficialmente un placer y correr es oficialmente de cobardes. Nos tildarían de paletos si dijéramos lo contrario.

           

            Análisis del  running

            Ponerse las zapatillas y abrir la puerta se puede comparar a la pereza de hacer las maletas. Los quince primeros minutos nuestro cuerpo trata de encender los motores y casi no pueden arrancar, ¿no es peor estar 8 horas comprimido en un avión?.

            Comentaba Cristina que pasado ese momento tampoco conseguía la sonrisa. ¿Por qué? ¿Qué le estás pidiendo a tu cuerpo, que vuele?         

            Quizás si rebajamos las expectativas y le pedimos lo mismo que a un viaje, nuestro nivel de satisfacción aumente.

            ¿Y si le exigimos lo mismo que al viaje? Voy a hacer un copia y pega y os dejo que vosotros valoréis si nos aporta también ese resultado o no:

            1º.- Estamos de vacaciones y enterramos los problemas laborales incluso personales. Despejamos la mente.

            2º.- Regalamos nuestros ojos con escenarios diferentes a los habituales.

            3º.- Rompemos rutinas.

….       4º.- Caminamos sin parar, a veces sin aliento, esperando con ansiedad girar en la próxima calle para descubrir una nueva maravilla.

            5º.- Al final del día soñamos con llegar al hotel a descansar y regalarnos con una cervecita.

           

Aprovecho para recomendar el libro de esta semana: “El Hombre en busca de sentido” Viktor Frankl.

            “La felicidad es el resultado de una actitud, independientemente de las circunstancias que la vida nos ofrece”

           

            Propósito.

           

            Hoy el reto es mirar tu running bajo otro prisma.

            Rebaja tu nivel de exigencias, míralo como se debe mirar a alguien que amas, con generosidad y entrega, sin esperar nada a cambio, no le pidas nada a tu salida. No lo juzgues, abre los ojos y observa.

 

            Olvídate de tus dificultades e inquietudes, poco importa que te consideres frustrado, simplemente haz que brote y conserva siempre sobre tu rostro una sonrisa, porque la sonrisa es, ante todo, una gran fidelidad a sí mismo.

Es un signo de confianza.

            Y en el fondo de tu alma coloca mientras te pones las zapatillas, antes que nada, como fuente de energía y criterio de verdad, todo aquello que te lleno de paz. Porque cuanto te deprima o inquiete es falso.    Es simplemente una creencia.

 

            Estas haciendo una historia. Hoy déjate trabajar por el running, o el Walden Running.

 

            Epílogo.

 

            Hace muchos años me aproximé al running como una enamorada caprichosa. Le pedía que me quitara calorías y que me pusiera en forma. Le controlaba las horas de salida y de llegada, le marcaba el entreno.

No le di opción a desplegar su verdad.

            Hoy miro atrás y descubro lo que me aportó cuando decidí dejar de intentar poseerlo:

-                Un día a la semana salgo con mi hermana Sole, a la que apenas veo a pesar de vivir las dos en Majadahonda.

Paso a paso descargamos sobre el Monte nuestras desesperanzas, incentivamos nuestros anhelos y compartimos alegrías y lamentos. Mi entrenamiento pierde ritmo pero mil alma gana paz y suelta peso. Volvemos a casa ligeras, sonriendo y deseando retomar la próxima semana nuestra sesión de psicoterapia.

-          Uno o dos días, salgo con mis compañeros de fatigas. Entrenamos, aceleramos o si alguno está de bajón, nos ralentizamos.

He tenido la oportunidad de crecer junto a ellos. He descubierto, sobre el  terreno, el valor de la entrega, la solidaridad y la paciencia, la amistad, la falta de egoísmo y la humildad.  Sus renuncias a sus tiempos, a sus marcas e incluso a sus medallas por ayudar a un compañero han transformado mi concepto de lo que es estar realizado.  

 

-          Otros salgo sola, entonces encuentro mi momento de silencio y me entrego a la oración.  Un  amigo me chivó tras volver del misterioso retiro de emaus: “Pilar, somos un sueño de Dios.”  

Aprovecho mi trote para hacer un hueco en mi alma, crear un vacío donde quepa lo nuevo y le digo al cielo. “Ahora que estoy en silencio, rebélame qué soy en tu sueño para tratar de ser eso.”

Pilar Amián

Fundadora del Método Walden para el running

Próximo Taller 5 de mayo

www.metodowalden.com

 

 

 

 

domingo, 22 de abril de 2018

Funcionamos en piloto automático
Me gustaría haber aprovechado más el tiempo de pequeña, haber absorbido mejor toda la información que me rodeaba, haber practicado más mis idiomas y no haberle echado tantas horas al sofá y a la tele.
Pero eso ya no lo puedo cambiar, es el pasado, lo hecho, hecho está. Sin embargo, al crecer me entró ansiedad por compensar el tiempo perdido.
Quería saber de todo y lo más rápido posible. Mis deseos incluían estudiar otra carrera, practicar más deporte, aprender más idiomas, formarme en liderazgo, en nutrición, conseguir meditar y mil opciones más que nos ofrece nuestro entorno.
Tarde, comprendí que cuantas más disciplinas dominara más capaz me volvería y con mayor éxito alcanzaría mis proyectos.
Pues todos queremos triunfar, a nuestra manera, en la vida.
¿Os ha pasado a vosotros algo parecido?
Si os encontráis en mi grupo, seguro que habéis seguido los mismos pasos: incrementar el número de actividades, llegar más tarde a casa y dedicarle menos tiempo a los amigos y a la familia. Aumentar el estrés y la ansiedad.
Hay un camino mucho más sencillo.
Se llama “Eficiencia”.
¿Qué es la eficiencia?
Hacer las mismas cosas, en menos tiempo y con mejores resultados.
¿Cómo?
Usando en nuestros proyectos, las herramientas mágicas que nos ha proporcionado la naturaleza. Aquellas que nos hacen superiores al resto de los seres vivos.
Las que nos dan poder.
Es curioso, pero vienen de fábrica y apenas las usamos. Funcionamos en piloto automático.
Os propongo que las desempolvéis para sacarles el máximo rendimiento: seamos eficientes.
Imaginaos que disponéis de una Thermomix y solo la utilizáis para triturar, cuando creo que hasta pone la mesa, pasa la aspiradora y recoge los platos 😉 o un móvil de última generación y sólo lo empleamos para hacer llamadas.
¿Cuáles son las herramientas?
La respiración.
La mente.
El sexto sentido.
La postura corporal.
La imaginación.
Funcionan solas, peo solo el hombre las puede controlar de un modo consciente
¿Por qué no las agarramos y las llevamos a nuestro objetivo para que nos ayuden a conseguirlo?
Eso es lo que practicamos en Walden. Os guiamos para que alarguéis la mano, las atrapéis de una en una, las sujetéis fuerte con los puños y las volquéis en vuestros proyectos.
¿Qué actividad elegimos para entrenaros en este proceso?
El movimiento:
Por eso no lo llamamos running, sino Walden Running o Runfulness.
Es un Active Mental Running , os hacemos correr volcando en el movimiento la respiración, la mente, el sexto sentido, la postura y la imaginación.
Raúl y yo nos reímos cuando nuestros chicos después de haber corrido sus primeros 30 minutos nos dicen: “ufff se nos ha pasado volando, tenía mi cabeza tan metida en controlar todo lo que nos habéis dicho que apenas he sido consciente de si me estaba cansando o no.”
“Uaauuu es la primera vez que corro sin cansarme!!!” “Ahora comprendo porque no puedo ponerme los cascos.”
No hemos elegido esta actividad al azar, tiene todo su sentido.
El running además de servirnos como laboratorio para aprender a Controlar esas herramientas nos aporta, como efecto secundario, otros tres beneficios que nos harán graduaros con matrícula de honor:
- La cultura del esfuerzo y la constancia.
- La promoción de la salud.
- La neurogénesis: creación nuevas neuronas y/o conexiones entre ellas en el cerebro.
Día tras día enseñamos a transformar esos procesos inconscientes en otros conscientes, para aplicar su poder allí donde sea necesario un mayor aporte de energía o destreza: ya sea apagar un s.o.s. laboral, solventar un exceso de trabajo o aplacar una discusión familiar.
Corremos más, disfrutamos más, nos cansamos menos e invertimos menos tiempo.
El cambio.
Hoy sigo queriendo saber y crecer, mis inquietudes no han cambiado, ni la tremenda lista de actividades que quiero desempeñar, pero si lo ha hecho mi actitud ante ellas.
Cuando me piden que les muestre mi historia, no puedo, pues no tengo fotos que reflejen un antes y un después.
Mi cambio es más sutil, aparentemente sigo siendo la misma Pilar, con el mismo peso y más arrugas en la cara; sin embargo, yo sé que algo ha mutado dentro de mí. Disfruto escuchando a mis hijos y a la gente, paso despacio las hojas de los libros y sonrío siempre con cariño a mis errores y los de los demás.
Próximo Taller 5 de mayo
contacto: pamian@metodowalden.com
www.metodowalden.com

viernes, 20 de abril de 2018

Próximo Taller Runfulness el 5 de mayo.
Todo sobre el Control Consciente de tu mente, alma y cuerpo.

Recorrido completo de las 5 disciplinas del Método Walden.
El Control Consciente:
1º.- C.C. de la Respiración
2º.- C.C. de la mente a través de la Meditación y/o Mindfulness.
3º.- C.C. del sexto sentido a través de la Armonía (Qi Gong y Propiocepción)
4º.- C.C. de la Postura Walden.
5º.- C.C. de la imaginación a través de las visualizaciones

Inscribete en www.metodowalden.com
pamian@metodowalden.com

miércoles, 18 de abril de 2018


Walden Project. Be what you really want to be.

 

Usamos las mismas estrategias que los políticos y las empresas para obtener mejores resultados.

Somos unos auténticos manipuladores.

Queremos traspasaros la llave maestra que usan aquellos para influir en nuestras decisiones para podáis influir en las vuestras.

Queremos enseñaros a engañaros para que no tengáis que confiar en la fuerza de voluntad.

La fuerza de voluntad es una amiga hipócrita. Está a nuestro lado cuando todo nos va bien, pero en cuanto descubre que estamos tristes y deprimidos, nos abandona por otros. Nos deja tirados.

 

En Walden la varita mágica es el Control Consciente.

Hemos construido el Método Walden sobre esa premisa infalibe. Jamás nos traiciona.

Es el corazón de nuestras cinco disciplinas:

C.C. de la Respiración

C.C. de la mente a través de la Meditación y/o Mindfulness.

C.C. de nuestro sexto sentido a través de la Armonía.

C.C. de la Postura Walden.

C.C. de la imaginación a través de las visualizaciones.

 

El proceso de toma de decisiones.

 

Quiero recordaros que el objetivo de nuestro Centro, sois vosotros, no el running.

La finalidad de nuestro centro es que aprendáis a tener metas, creer en ellas y perseguirlas con constancia.

Hemos elegido el movimiento como campo de entrenamiento porque exige más que cualquier campo salir de la zona de confort.

Si nuestra gente, muchos de los cuales jamás habían corrido, consiguen sonreír y desear salir a correr cada mañana, gracias a las cinco disciplinas del Método, el resto de las metas que se proponga serán pan comido.

            Y lo consiguen.

 

La toma de decisión se truca usando la segunda y la quinta disciplina del Método, el Control Consciente de nuestro subconsciente y de nuestras opciones.

 

Mis planes a medio y a largo plazo.

 

Su éxito dependerá de las elecciones que haga en mi día a día para su consecución.

Mis elecciones estarán condicionadas por la similitud emocional que tengan con mi ideal mental. Como ya os dije en el post anterior éstas jamás se basan en la racionalidad ni en las matemáticas. Decidimos las opciones que cuyos atributos exaltan nuestros centros de placer o de satisfacción.

 

¿Cómo manipulo mi mente para que me dirija sin apenas pensarlo, sin usar la razón, a mis objetivos?

Quiero que A (mi ideal mental) sea igual a B (mis metas).

 

El Running.

1º.- Modificando el A: Las creencias que han llevado a mi mente a construir la opción ideal.

 

Ejemplo: Desde pequeño nos han metido en la cabeza que correr es un sufrimiento. La prueba de los mil metros la temíamos en el colegio. Mis padres cuando comentaba que me iba a correr decían “Uffff que horror pobrecita!!” Nuestros amigos nos repiten una y mil veces “correr es de cobardes”.  

Nuestras creencias nos llevan a crear la idea mental de que “correr es sufrir.”

Empecemos a suplantarla:

A los niños les gusta correr, les fascina, hasta que llegamos nosotros les tumbamos la imagen.

-          Visualicemos videos de corredores sonriendo, películas de  historias motivadoras de corredores.

-          Imaginémonos corriendo con una sonrisa en la playa o en un atardecer en África.

-          Y repasemos por las noches mentalmente antes de cerrar los ojos nuestras salidas en grupo con los walden runners, haciendo meditación en movimiento dirigida por Raúl, jugando a medir nuestra cadencia con el metrónomo, contando nuestra respiración, subiendo las cuestas en ascensor o corriendo en dos fases mientras nos elevamos como un globo aerostático.

Repasando estas escenas día y noche conseguimos manipular el subconsciente: catapultamos la diapositiva mental de sufrimiento con otra de placer.

 

2º.- Modificando el B: El display  de nuestros objetivos.

 

Diseñamos de un modo atractivo las opciones que debemos elegir.

Ejemplo: Manipulemos el diseño de nuestras salidas de running.

-          Cambiamos el Running por el WaldenRunning.

-          Inyectamos una finalidad excitante al movimiento, que sea un momento de contemplación y transformación interior.

-          Realizamos salidas grupales con aquellos que nos contagien la emoción de Walden.

-          Elegimos una ropa adecuada y unas zapatillas acordes con la técnica ligera y sin esfuerzo.

 

De esta manera hemos trabajado en dos frentes, somos unos campeones.

Si las empresas consiguen encadenarnos a sus productos trabajando solo sobre un frente (el B), nosotros lo conseguiremos también. Será sólo un juego

Recordad que nuestras elecciones jamás serán racionales, por eso nos cuesta tanto entender las acciones de los demás y las juzgamos tan a menudo. Pretendemos aplicarles a ellos baremos que no funcionan ni siquiera con nosotros y patinamos.

Y si tenéis alguna duda sobre cómo empezar a hacerle trampas a vuestro subconsciente siempre podréis contar con nosotros.

 

Bienvenidos al Runfulness

Próximo taller el 5 de mayo.

Tres horas intensivas del Método Walden

Pilar Amián

Cofundadora del Método Walden
 
www.metodowalden.com
pamian@metodowalden.com

 

 

lunes, 16 de abril de 2018

Los buscadores de sueños.
Anoche me decía una de nuestras seguidoras: ¿si no se puede hacer ejercicio como lo hacemos?
Mi contestación ha sido esta:
Nuestro objetivo con el Método Walden no es que corráis en sí, no es que hagáis una maratón o una media. Quien quiera hacerla, maravilloso, pero esa no es nuestra meta.
La meta es conseguir una transformación interior que os lleve a querer perseguir metas y si todavía no las tenéis a querer buscarlas.
La teoría que utilizamos para ello, seguro que parte de ella la hayáis escuchado ya en otros cursos, talleres o leído en libros, pero probablemente jamás entrelazada. 
Son las cinco disciplinas del M.W.
El campo de prácticas en el que demostramos cómo aplicar todo aquello es "el Movimiento". Es el que nos saca de los libros y aulas y nos introduce en el campo de la experimentación.
Moverse no tiene que ser sólo correr una hora, puede ser andar o andar-trotar suavecito. 
Cada uno aprende lo que es moverse dentro de su respiración. Esa es su medida.
Es necesario salir de la zona de confort del aula o de la lectura si realmente queremos introducir ese cambio.
Pero el movimiento es a su vez el trampolín para masterizar estas disciplinas que nos servirán de herramientas mágicas a lo largo de nuestra vida. Quien puede lo más (el esfuerzo de ponerse unas zapatillas) puede lo menos (nuestros sueños)
Las disciplinas del M.W. son:
1º.- Respiración en movimiento ( puente maravilloso para controlar otras situaciones difíciles de la vida);
2º.- Mindfulness en movimiento ( perfecto entrenamiento para aprender a controlar los pensamientos catastrofistas),
3º.- Armonía en movimiento ( fantástica escuela para empezar a sintonizar en nuestras elecciones el pensamiento/el sentimiento y la acción);
4º.- Postura Walden ( evitará los dolores posturales) 
5º.- Y las visualizaciones en movimiento (vamos construyendo un nuevo subconsciente que se asimile a nuestros sueños)
Queremos que cada noche antes de cerrar los ojos, miréis la luna y construyáis un sueño, y que cada mañana os despertéis con la ilusión de perseguirlo.
Los sueños pueden ser grandes o pequeños, sencillos o sublimes, materiales o espirituales, familiares o profesionales.
Sólo tenerlos cambia la vida. 
Pilar Amián. 
pamian@metodowalden.com
Ven a Walden.

jueves, 12 de abril de 2018




¿Porque abandonamos nuestras metas ?



Durante muchos años empezaba dietas y las abandonaba;   perseguía sueños y los dejaba evaporarse; proyectaba objetivos y me rendía.

 Desesperada me recriminaba no tener  fuerza de voluntad y ser tan débil.

Aun así, observando a aquellos que si la tenían, nunca perdí la esperanza de averiguar que hacían ellos diferente.

Mi Monte del Pilar seguro que tarde o temprano me lo revela, - pensé. Coloqué la duda en mi incubadora,  entorné los ojos,  conecté  con mi gabinete de crisis (goo.gl/P6o6Vw) y troté dejando a los procesadores de información que trabajaran solos.

 La respuesta cayó en mi camino,  como siempre, de la mano de un libro de Michael Lewis sobre los dos psicólogos israelís Daniel Kahneman, premio Nobel de Economía 2002, y Amos Tversky.  Afrontaron de lleno mi situación personal, estudiaron la mente humana en el proceso de “Toma de decisiones”.

El proceso de toma de decisiones.

Estos psicólogos afirman que el proceso de toma de decisiones del hombre no es racional y matemático sino que está basado en la búsqueda de similitudes entre  nuestra opción ideal y la oferta externa.  Cuantas más equivalencias encontremos, más fácil será que la tomemos

Pone como ejemplo el siguiente:  Que una persona prefiera el café al té y el té al chocolate caliente,  no implica que vaya a preferir el café al chocolate caliente. La regla de tres no se aplica a nuestras elecciones. 

El juicio humano es absolutamente incongruente en sus decisiones, no se rige por la lógica sino por sus pasiones: la búsqueda del placer. 

En los últimos treinta años las empresas  y los políticos, asesorados por psicólogos, dirigen sus productos al consumidor basándose en el estudio de la mente humana en el proceso de toma de decisiones.  Manipulan sus mensajes resaltando determinadas cualidades que saben encenderán nuestras emociones.  Disfrazan sus productos con aquello que saben guardamos en nuestro subconsciente como ideal.

Mis decisiones.

Pensé: - “Bingo,  ahí está la explicación.  No he seguido las instrucciones de mi cerebro”.

Entender cómo funciona la mente a la hora de tomar decisiones es la llave que abre la puerta de mis metas o de mis proyectos tanto profesionales como personales.

Hasta entonces me había aproximado a las metas de la misma forma que lo hago a los mandos de la televisión nueva. Como carezco de paciencia, los cojo y trasteo todos los botones por no molestarme en leer las instrucciones. El resultado suele ser que acabo estrellando el mando contra la pared y lo sustituyo por un libro: abandono mi objetivo.

 Con el tiempo aprendí que si seguía las instrucciones  paso a paso el resultado era increíble: Aprietas dos botones y “voilá” ésta funciona. Magia.

Nos empeñamos en hacer lo mismo con los proyectos,  nos lanzamos a ellos sin diseñar cuidadosamente el plan de acción mental,  queremos saltarnos estos pasos y por eso terminamos estampándolos contra la pared.

¿Cómo diseñamos el plan mental?

Propongo que sigamos las instrucciones de uso de la mente que este premio nobel israelí nos propone.  

Vamos a dejar de culpar a nuestro pasado, nuestra infancia, nuestros genes o nuestros padres por nuestros fracasos, esto no lo podemos cambiar. Juguemos con las variables de las que disponemos hoy.  Olvidemos a Freud y centrémonos en el “Ahora”.

 Manipulemos nuestros proyectos en la mente primero.

Instrucciones de uso.

Mi meta la llamaremos A.  Mi ideal mental, lo llamaremos B.

Para lograr la meta A sin abandonarla, ésta debe ser lo más similar a mi ideal B a nuestros ojos.

A debe parecerse muchísimo a B. Vaya lío.

Pongamos un caso práctico: Llevar una dieta sana.

La dieta sana (A)

Mis ideal placentero grabado en mi subconsciente:  la comida basura (B).

Mi razón me dice las opciones que debo tomar (A) pero mi cerebro  y mi centro de recepción del placer no las identificaba como favoritas (B). El resultado será que únicamente elegirá mi razón las opciones sanas en aquellos momentos en los que estoy fuerte, todo está bajo control y la vida me sonríe.  La fuerza de voluntad funciona.

Pero en aquellos momentos en los que mi sentido común está diluido por un aluvión de olas de cortisol, adrenalina  y noradrelanalina , provocadas por el estrés y la ansiedad , fracaso. Estos abundan y son los que me llevaban por la calle de la amargura.

 La fuerza de voluntad perderá siempre la batalla.  Las últimas investigaciones apuntan que aquellas personas con una tremenda fuerza de voluntad mueren antes. La causa es el estrés que este control continuo provoca.  

Estamos condenados.

¿Cómo logro que A sea igual a B? ¿Qué mis deseos y mis metas sean parecidos?

Seamos pícaros. Manipulemos como los políticos y las empresas.

Voy a trabajar sobre A y sobre B.

1º.- Mi objetivo: A

Disfrazar mi objetivo con aquellas cualidades que más se aproximen a mis imágenes mentales de lo ideal.

En una dieta sana, truco los alimentos para que parezcan iguales a mi comida basura ideal, les meto mucho color, sabor, textura y los tomo relajada, dándoles una importancia especial.

Por ejemplo: si  me gusta desayunar cereales con chocolate y leche, me diseño un desayuno a base de copos de avena, cacao cien por cien, frutos del bosque, leche o yogur desnatado y frutos secos.

Es el mindfoodness. Hay que echarle imaginación en vez de lanzarse a tomar un plato de lechuga con pollo a la plancha

2º.-  Mi deseos:  B.

Reseteo mi subconsciente.  Las visualizaciones son la varita mágica para lograrlo.

Elimino los mensajes saboteadores tipo: “a mi me gusta más la nocilla” “ que tristeza comer esto” “lo haré pero no me gusta”…  los cambio por otros tipo: “esto me fascina, me encanta, me encuentro genial…”.  

Visualizamos la comida sana día y la noche inyectándole pensamientos positivos: sensaciones de placer al tomarlo, recuerdos de lo bien que me encuentro después, me imagino saboreándolos lentamente….

Grabo esto poco a poco en mis neuronas, de modo que cuando la comida basura aparezca, saltará en mi retina la imagen de mi plato sano y mi subconsciente dirá: “uffff noooo que me sienta fatal y además me gusta más la mía”.

Yo elijo

He decidido dejar de quejarme porque no consigo mis objetivos y fallo una vez detrás de otra.

He optado por aprender y disfrutar desenmascarando mis errores, me sonrío con cada traspié. Voy implementando el proceso día a día,  dos pasos adelante uno hacia atrás, siempre avanzando. Creando .

 En Walden nos aproximamos de este modo al Running, acercamos vuestro A a vuestro B. Manipulamos la imagen que tenéis en vuestro subconsciente del esfuerzo que supone correr y a su vez os diseñamos un Running diferente,  lleno de colores,  sentidos,  senaciones, emociones y pasión:  el Walden Running.

Y como quien puede lo más puede lo menos,  descubiertas las instrucciones,  alcanzar vuestra meta será tan solo un juego.

Pilar Amián
Fundadora del Método Walden.
www.metodowalden.com
pamian@metodowalden.com
Próximo taller sábado 21 de abril.


lunes, 9 de abril de 2018

Reportaje en Telemadrid sobre el Walden Running.
El Proyecto Walden corre por una causa: 
“Devolver la ilusión a cada uno de nuestros runners”
Ilusión por vivir.
Ilusión por cambiar.
Ilusión por crecer.
Ilusión por crear.
Ilusión por sonreír.
Gracias Walden Runners por ayudarnos a extender nuestra causa.
pamian@metodowalden.com
www.metodowalden.com

 
 
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sábado, 7 de abril de 2018

¿Quién quieres ser dentro de unos años?


Preciosa reflexión de nuestro Walden Trainer Raúl de la Cruz: 
Tras el entreno con el grupo de WaldenRunners de los miércoles, nos surgió está pregunta que os comparto: ¿Quién quieres ser dentro de unos cuantos años? Quieres ser alguien que apenas le apetezca salir de casa porque le cuesta moverse? 
Quieres ser esa persona que está casi todo el día quejándose por algún dolor? 
Quieres ser una persona gruñona? Quieres ser alguien a quien el exceso de peso le impida disfrutar de la vida que quisiera? Cuando no te apetezca salir a correr, a moverte, a subir una escalera, una cuesta, cuando te dejes caer en la pereza, vuelve a preguntarte ¿Quién quieres ser dentro de algunos años? Que tengáis buen día!!! Gracias Raúl por tu reflexión, nuestros Waldenrunners han elegido moverse y vosotros? 
Mi sueño es cumplir los 80 trotando, caminando, poniendo siempre un pie delante del otro, no pienso dejar que las telarañas cristalicen en mis articulaciones.  Os animo a pasar el plumero cada día suavemente. 
Os esperamos en Walden. Próximo taller 21 abril
pamian@hotmail.com